viernes, agosto 18, 2006

Flyer164

Cuando uno maneja se da cuenta de que el mundo esta lleno y que no cabe nadie más. Digo esto porque en cada semáforo que uno para, por lo menos hay 4 personas pidiendo plata en diferentes modalidades.

El que esta pa`la cagaa y pide por necesidad, el que te vende el diario (y son como 5 tipos de diarios), el que hace malabarismos y cabriolas, el que te vende las verduras y chocolates o helados, y por último y el más desagradable de todos: el que te limpia el parabrisas.

No hay ninguna manera de que cuando este detenido en un semáforo, desee que me limpien el parabrisas, aunque este tuviera pegado un completo petrificado en él (hay más posibilidades que me quiera comer un helado). Ese es un menester que solo hago en un servicentro, una vez al año cuando tengo un millón de insectos pegados en él y no me dejan ver. Y lo más desagradable es que son CARGANTEMENTE INSISTENTES, pareciera que disfrutaran cuando uno se deshace en explicaciones para que no te WEBEEN, y te ponen su huea mugrienta con la que andan limpiando en el vidrio aunque uno les diga que no tiene plata (seguramente piensan que uno en la mañana se sube al auto y deja un porcentaje de monedas a mano para darle a ellos) como si uno se acordara de esos HUEBONES cuando se levanta. Primero me acuerdo del millón y medio de estacionadores que hay, después de eso en todos los giles te van a tocar la bocina por ABC motivo, después de el arsenal de hoyos que voy a tener que esquivar haciendo las maniobras extremas dignas de un corredor de rally, y después de eso me acordare de que no quiero salir.

Así que se pueden meter su wea pa` limpiar vidrios en la oreja.

Además de todo eso no se puede sacar ni la mano por la ventana, sin que alguien te venga a ofrecer algo inútil que no quieres.

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